Otros eggs centenarios

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Noticutre / Filosofando desde las islas de Ciudad Universitaria. Hoy celebramos un centenario más en esta nación del águila y la serpiente, y por curioso que parezca, no nos referimos a una fecha marcada por gritos, balazos ni llamados espiritistas para derrocar a una bola de cientísicos... No, damita; no, caballero: hablo de los primeros 100 años de la UNAM como universidá nacional.

Aunque la noticia está chida, me parece un poquito hipócrita y mamón que ya dos o tres gángsteres de cuello blanco se cuelguen de la fecha para hacer declaraciones triunfalistas y felicitar a la universidá, y que en el Congreso pongan el nombre de la UNAM con letras de oro y reciban al rector para que les suelte un choro que todos van a aplaudir (de pie incluso, para lucirse ante las cámaras y mejorar sus votos), pero que en el fondo nadie va a pelar.

Al chile son mamadas: La UNAM, y las universidades en general (sobre todo las públicas) hacen esfuerzos notables por lograr que un montón de lelos bien lelos preparados por televisa y la SEP se vuelvan profesionistas (aunque, irónicamente, cuando les funciona bien el cerebro no encuentran dónde chambear... será que aprenden a interrogar y a veces las preguntas no son cómodas para el patrón). Y también las unis tienen un papel importante como hacedoras y promotoras de la ciencia, la tecnología, la cultura y el deporte en la Suave Patria.

Por si fuera poco, los profesores o investigadores universitarios son los únicos que dan explicaciones fiables cuando algún terremoto, huracán, chupacabras o fraude electoral azota al país, y hasta los campus universitarios suelen ofrecerse como centros de acopio y albergues para la población civil, en caso de desastres (naturales y artificiales :B).

A cambio, las unis e institutos reciben un presupuesto cada vez más flaco... Ah, sí, y un mayor número de aspirantes (y rechazados) cada año, además de algún ataque ocasional por parte de la Minoría ridícula, sin que se aclaren los hechos.

Pero antes de tirar lágrimas de Remi, aclaramos que no se trata de santificar a estas instituciones, porque luego hay cada espécimen en ellas que bueno... Y en veces su burocratismo es tan nefasto que las vuelve leeentas, leeentas.

Por ejemplo, también hoy salió una nota en el cada vez más cutre diario Milenio, en la que se habla de la realización de un Foro de Megatendencias (ámonos), en Coahuila, con la participación de la Universidad Autónoma de Coahuila, la Universidad del Valle de México y el Instituto Tecnológico de Saltillo, a fin de tratar de superar algunos “pequeños rezagos” formativos.

El citado panfleto cita las palabras de José Antonio Lazcano, director General de Corporación Mexicana de Investigación en Materiales, sobre la nanotecnología o manipulación de la materia a nivel de átomos y moléculas:

“Esta tecnología se empezó a manejar en el mundo desde los años 60, y nosotros, en el 2010, apenas estamos planteando cómo vamos a aplicar los resultados de las investigaciones que se hacen en el mundo. Como en muchas áreas de la ciencia y la tecnología en nuestro país, vamos rezagados, lamentablemente”. Caput.

Entonces, por todo lo antes dicho, desde aquí le mando unos séntidos eggs a todos los doble moralinos que hoy digan: “sí, le vamos a dar todo el apoyo a la educación, vamos a aumentar el presupuesto, es nuestra prioridad, es por nuestros jóvenes, ellos son el futuro” y demás mamadas, y, como siempre, terminen haciendo absolutamente nada que no sea cobrar sus quincenas y lanitas por debajo del agua con puntualidad.

Eggs también a quienes, desde el interior de las universidades (llámense UACM, UJAT, UdeG, UAEM, UV, UAT, UANL, IPN o UAM), sabotean su labor con grillas y desfalcos, y, y, y... Bueno, ya: fin del choro agüevante.