Presuntos eggs

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Noticutre. En piyama y con lagañas en los ojos / Así es, damita, caballero: en un arranque de profesional profesionalismo y a pesar de que andamos bien cortitos de tiempo por otras ocupaciones menos divertidas que hacer este blog, pero que desafortunadamente debemos cumplir porque son las que nos dan feria (puerca vida :B), les entregamos un comentario sobre lo que ocurre en el mundillo nacional del cine y el entretenimiento.

Pues nada, que mientras todavía hay parte de la gran familia mexicana que se dedica a seguir especulando sobre el final de cierta novela rascuache o a darse golpes de pecho porque nuestra (ja, ja, seee :B) película no se trajo ningún premio Oscar, el Consejo de la Judicatura Federal (CJF) autorizó la suspensión provisional del exitoso documental Presunto culpable, quesque porque los testimonios de un testigo del caso fueron filmados sin su consentimiento, o algo así, dice el diario La Pornada.

El argumento es lo de menos, pues todo el asunto más bien huele a excusa pedorra para encubrir un vulgar caso de censura, ya que si bien el Artículo 87 de la Ley Federal de Derecho de Autor prohibe que el retrato de una persona sea utilizado o publicado sin su consentimiento o el de su representante, también especifica: "No será necesario el consentimiento a que se refiere este artículo cuando se trate del retrato de una persona que forme parte menor de un conjunto o la fotografía sea tomada en un lugar público y con fines informativos o periodísticos". Total, a ver cómo se arreglan u_u

Siendo morbosos, por supuesto que el asunto tiene más cola para pisar. Presunto culpable narra la historia de Antonio Zúñiga, un vendedor que es arrestado en la Ciudad de México, acusado del asesinato de una persona a la que ni conocía. A pesar de su mostrada inocencia, le echan una condena de 20 años en el tambo. Los abogados del caso, Roberto Hernández y Layda Negrete, decidieron grabar en video todos los pormenores y lograron que el juicio se repitiera, dándole la libertad al agraviado.

La cinta es el resultado de todas las tomas hechas por los susodichos abogados y el acusado y, por supuesto, queriendo y no muestra cualquier cantidad de porquerías, corruptelas y deficiencias del sistema de justicia de la Suave Patria.

Dice ese panfleto que se hace llamar El Universal, "Presunto culpable ofrece una mirada en primera fila del hermético sistema judicial mexicano, en el que el acusado es el que tiene que demostrar que no es culpable. Los juicios realizados principalmente en papel no dejan espacio para el escrutinio del público. Críticos del sistema sostienen que esto trae como consecuencia que los inocentes sean encarcelados y los criminales queden en libertad".

Luego entonces, amiguito, nuestro consejo es que si se te ocurre hacer una película o un documental, no importa que:

• La cinta tenga una gran recepción del público, a pesar de ser un documental, es decir, un género que poco o nada gusta en México.
• La cinta sea un éxito en taquilla durante su estreno, justo en una época en que la que los filmes con más promoción son los nominados al agüevante premio Oscar.
• La cinta reciba cualquier cantidad de premios y reconocimientos a nivel nacional e internacional.
• La cinta sirva para crear nuevos caminos en cuanto a la distribución de películas en México.
• La cinta deje el precedente de que el cine es un medio de expresión para quien tenga algo qué decir, y no sólo un reducto de directores frustrados de la Condesa y Coyoacán que viven de hacer anuncios para televisión y campañas políticas ajenas a sus ideales.
  

Lo que importa, parece, es que hagas cine bonito, jocosón, picarón, bien familiar y que no le toque el culo a la Dirección General de Radio, Televisión y Cinematografía (RTC), porque de lo contrario encuentran la manera de censurarte sacarte de la jugada más rápido de lo que te tardas en gastar tu jugoso salario de 6 mil varos mensuales para pagar casa, escuela, auto y demás lujos guanabís (o más rápido de lo que Russox te reclama en féisbuc por no sacar una nota u_u).

Desde la redacción de Cosas Triviales le hacemos al adivino y vaticinamos que la RTC se la va a pelar, porque la presión nacional e internacional va a ser fuerte, y ya de por sí el gobierno anda medio quemadón por lo del caso Aristégui, que puso en tela de juicio su respeto a la libertad de expresión (además, yo todavía no la he visto; por eso no quiero que la quiten y menos esperarme hasta que se arregle el lío :B).

Y, finalmente, aún consiguiendo que se suspenda la proyección de Presunto culpable por varios meses o de manera definitiva, ya sabemos que hay otros canales de distribución, como internet y los piratas de confianza, que pueden hacer que la cinta corra de mano en mano, aprovechando la inigualable publicidad de que "es una película censurada", y que, por tanto, hasta quienes no la conocían o no tenían pensado verla, la verán.

El tiro por la culata: RTC ya volvió a esta peculiar cinta que corre a contracorriente en un film de culto automático :B